¿Cómo funciona el proceso de curación?

En caso de corte, quemadura o herida, el tejido cutáneo se daña y debe reconstruirse. Este proceso se denomina curación. En el caso de las heridas más pequeñas, los bordes se reconstruyen de forma natural, o mediante cirugía, dejando una huella más o menos visible, la cicatriz.

La piel, compuesta por tres capas distintas, protege nuestro cuerpo formando una envoltura semipermeable. La parte visible de la piel es la epidermis. Este tejido, que está en contacto directo con el mundo exterior, representa la capa superficial. A continuación viene la dermis. Este tejido conjuntivo varía de grosor según la región del cuerpo. Por último, la hipodermis es la capa más profunda y gruesa de la piel.

En caso de lesión importante, la cicatrización de las capas más profundas sigue siempre el mismo proceso:

• En sutura de la herida las riberas se juntan
• En coagulación
• En infecciosa (es necesario dejar que se produzca el ciclo bacteriano)
• En reacción inflamatoria exudación y yemas carnosas
• En resolución con regeneración de la epidermis

¿Por qué causan trastornos las cicatrices?

En cada etapa del proceso de curación, pueden producirse frenazos o aceleraciones. Si la zona se infecta, la cicatriz puede tener dificultades para cerrarse. Las fibras de la cicatriz también pueden hipertrofiarse, provocando un engrosamiento y enrojecimiento de la superficie.

Fisioterapeutas, osteópatas, terapeutas ocupacionales y médicos observan con regularidad problemas relacionados con cicatrices alteradas. Incluso las antiguas, retienen casi sistemáticamente un recuerdo traumático relacionada con la lesión o la intervención quirúrgica. Esta afección puede provocar molestias mecánicas o dolorosas, a veces a distancia de la lesión.

Hay disturbios en :

• Funciones locomotoras tras operaciones, fracturas y desgarros de rodillas (meniscos, cruzados, prótesis), caderas (prótesis), tobillos (fracturas, placas, rotura de ligamentos), cuádriceps, isquios y pantorrillas (desgarros), etc.
• De pie tras operaciones de espalda, cesáreas y celioscopias,
• Movimientos de manos y brazos tras fracturas y operaciones en los miembros superiores, hombros, codos, muñecas y manos.

Así que una cicatriz, incluso una insignificante en el estómago que parece totalmente integrada, muy a menudo sigue causando molestias a varios niveles.

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¿Cómo pueden resolverse los distintos problemas de cicatrización?

Parches STIMCARE son la solución natural y eficaz para liberar tensiones y rehabilitar cicatrices.

Los parches actúan como espejos, reflejando más de 95% de la luz infrarroja emitida por el cuerpo humano. Esta concentración de infrarrojos endógenos activa la microcirculación sanguínea, estimula el suministro de oxígeno y favorece la recuperación de las cicatrices.

No transdérmico, el parche no deja pasar ninguna sustancia química. Permanece en la piel al menos cinco días y su acción curativa beneficiosa dura hasta dos semanas.

Para una acción eficaz, cubra la cicatriz con 1 ó 2 parches infrarrojos.

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• Después de unos minutos, un liberación de los movimientos perturbados por la cicatrizÉsta se desactiva por la acción del parche. Al devolver rayos infrarrojos endógenos, el parche estimula la dilatación de los microcapilares y la reactivación de las terminaciones nerviosas. Esto devuelve la información normal al cerebro y restablece automáticamente los patrones naturales del organismo.

• Si la cicatriz está hinchada, es queloide, roja o adherente, la activación de la microcirculación, gracias a la radiación infrarroja, hará que gradualmente reactivar todas las fases de curación. Después de 2 a 4 meses de utilización diaria de los parches sobre la cicatriz, se observa una disminución de la decoloración, una reducción del grosor, una liberación de las adherencias, en resumen, una vuelta a una cicatriz sana, flexible, blanca y normal.

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Es posible reiniciar el proceso de cicatrización y rehabilitar cicatrices de varias décadas de antigüedad. Los parches pueden aplicarse en cuanto se cierran las cicatrices, Entre 30 y 45 días después de la lesión o la operación. Además, los parches bloquean completamente los rayos UV, protegiendo la cicatriz del sol y evitando quemaduras o alteraciones durante la fase de cicatrización, que dura al menos 18 meses desde el cierre de la cicatriz. ¡No espere más para completar el tratamiento de sus antiguas cicatrices!